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La diferencia en el consumo energético de los distintos ordenadores es bastante significativa. Depende en gran medida del tipo de ordenador, el modelo y la marca. Por ejemplo, los de sobremesa son siempre los menos eficientes. Por otro lado, las pantallas tienen un consumo energético considerable que aumenta al aumentar su tamaño.

Así pues, el consumo de un equipo medio que no esté ejecutando ningún programa es de al menos 60Wh, y el del monitor, de unos 30 Wh más (aunque pueden alcanzar los 65 Wh en monitores de más de 27" y alto rendimiento).

La UPV, a través de su política ambiental, se compromete a mantener la mejora continua de sus prácticas ambientales y en particular a racionalizar el consumo energético, lo cual conlleva también ahorros económicos. Para materializar este compromiso, necesitamos de la colaboración de toda la comunidad universitaria, y conseguir entre todos ser más respetuosos con el medio ambiente.

Desde el ASIC, creemos que es de gran utilidad que el usuario conozca la manera de reducir el consumo energético de los ordenadores de su puestos de trabajo y de su hogar

Para ello hemos elaborado una guía donde le facilitamos información sobre:

  • Cómo ahorrar energía.
  • Cómo configurar el ahorro energético en su equipo.
  • Cómo encender remotamente su ordenador.

¿Cómo puedo ahorrar energía?

¿Todos los ordenadores consumen lo mismo?

El consumo energético de un ordenador encendido depende básicamente de su potencia de cálculo (tipo de procesador o CPU que tiene el equipo) y de su potencia gráfica (sobre todo cuando llevan un procesador específico o GPU dedicado a gaming, renderizado de video o minado de criptomonedas, por tratarse de actividades intensivas).

Además, el número de dispositivos internos conectados al equipo, también incrementa su consumo eléctrico notablemente. Entre esos dispositivos encontramos la típica tarjeta de sonido integrada, la tarjeta de red, el uso de los puertos USB para cargar o conectar dispositivos externos, las unidades ópticas de lectura/grabación de CD/DVD/Bluray y los ventiladores encargados de la refrigeración del equipo, entre otros.

Por lo tanto, la primera medida de ahorro energético es comprar un equipo dimensionado a nuestras necesidades, procurando que tenga la máxima eficiencia energética. Hoy en día los equipos vienen certificados para que conozcamos la eficiencia de cada componente.

Estas etiquetas son una manera de comprobar que el producto se ha fabricado de manera respetuosa con el medio ambiente y que es eficiente energéticamente. (Ejemplos: Etiqueta Ecológica Europea, etiqueta Energy Star, Angel Azul, TCO 99)

Si quieres saber más, puedes consultar la Guía de buenas prácticas ambientales para la compra de equipos informáticos.

  • Mediante el protector de pantalla

El protector de pantalla supone un ahorro de energía si se configura para apagar el monitor cuando el ordenador lleva unos minutos sin usarse.

  • Configurando el ahorro de energía en todos los dispositivos que lo soporten

Los PCs, los monitores, las impresoras, fotocopiadoras y algunos otros equipos tienen modos de ahorro de energía que hacen que consuma menos o, incluso, se apaguen, cuando llevan unos minutos sin actividad. Intente configurarlos.

  • Apagando el equipo y todos sus periféricos cuando no lo necesite

Evidentemente, la opción que supone un mayor ahorro de energía es apagar el equipo totalmente cuando no se necesite. Recuerde también apagar todos los periféricos: monitor, impresoras, discos externos...

Pero existen otros modos de ahorro energético sin llegar a apagar por completo el equipo. Estos modos tienen la ventaja de que el ordenador se enciende más rápidamente y nos presenta el estado en el que lo dejamos.

Además, el ordenador puede ser configurado para pasar automáticamente a estos modos al detectar un periodo de inactividad que puede ser configurado por el usuario.

Estos modos son comúnmente llamados suspensión o reposo e hibernación.

  • ¿Qué son los modos de suspensión e hibernación?

La suspensión o el reposo es un estado en el que el equipo deja de dar corriente a muchos de sus componentes y mantiene sólo los fundamentales: básicamente la memoria. Técnicamente es definido como modo S3 en el estándar ACPI. Por supuesto, un ordenador suspendido consume más que uno apagado.

La hibernación es un estado al que se llega tras guardar el contenido de la memoria en el disco duro y apagar completamente la máquina. En este modo se puede incluso quitar el cable de alimentación y transportar el equipo. Es el que más ahorra pues el consumo es nulo. Técnicamente es definido como S4 en el estándar ACPI.

También hay sistemas operativos con un modo híbrido en el que el ordenador vuelca la memoria a disco como si fuera a hibernar, pero se queda encendido en modo de suspensión. De esta manera se despierta más rápidamente cuando se requiere pero en caso de fallo eléctrico la memoria ha quedado guardada en el disco y se despierta como de una hibernación.

Las placas base que soportan los estándares ACPI pueden ser configuradas directamente desde el sistema operativo sin recurrir a las pantallas de la BIOS como antaño.

  • ¿Cómo puedo pasar mi equipo al modo de suspensión o hibernación?

Se puede suspender o hibernar el equipo de varias maneras:

    • Al ir a apagarlo eligiendo simplemente “suspender” o "hibernar" en lugar de “apagar”

    • Configurando el ahorro de energía desde el panel de control para que el equipo se suspenda o hiberne tras un periodo de inactividad.

    • En algunos teclados existe una tecla que suspende el equipo.

En las versiones Home Edition de Windows es posible que no aparezca el icono de Hibernar. Para llegar a ese icono hay que pulsar la tecla mayúsculas cuando aparecen los iconos Suspender, Cerrar Sesión y Apagar.

En algunos equipos es necesario habilitar primero la hibernación para que funcione. Para ello hay que ir al "Panel de control", "Opciones de energía".

  • ¿Y qué pasa con mis programas cuando el equipo se suspende o hiberna?

Los programas se paran. Ninguno puede ejecutarse mientras el equipo esté en uno de estos modos. Sin embargo, a la mayoría no les pasa nada raro y lo soportan bien.

Una excepción importante son los que utilizan la red. El ordenador no puede estar ofreciendo ningún tipo de servicio en estos modos y los programas clientes de red también pueden perder su conexión si se permanece en estos estados durante un tiempo considerable. Muchos de ellos la recuperan perfectamente, como el navegador o el cliente de correo, pero otros no la recuperan, como los clientes SSH.

  • ¿Y cómo pongo en marcha luego el equipo?

En función del equipo y del modo en el que haya quedado, a veces es suficiente con pulsar una tecla.

En otras ocasiones es necesario pulsar el botón de encendido del equipo.

Otra posibilidad es despertarlo desde la red. A esto se le llama WakeOnLan. Para que acepte este modo hay que configurarlo previamente para que la  tarjeta de red se quede activa y ésta pueda comunicar a la placa base que se reactive. Desde el ASIC hemos preparado una utilidad para despertar el equipo desde los menús de la Intranet.

¿Cómo configuro mi equipo para que ahorre energía?

Si su equipo comparte ficheros o impresoras, o desde él realiza conexiones remotas a otros equipos por SSH, le aconsejamos configurar el modo de apagado automático del monitor a los 10 minutos de inactividad; pero no la suspensión ni la hibernación automática.

En cambio, si su equipo no comparte nada y utiliza únicamente el navegador, el cliente de correo y aplicaciones instaladas en el propio equipo, le aconsejamos:

  • configurar el apagado automático del monitor al cabo de 10 minutos,

  • la suspensión automática a los 20

  • y la hibernación a los 30 minutos de inactividad.

Estos tiempos son orientativos. Si su experiencia no es agradable con ellos, puede aumentarlos a un tiempo en el que se sienta cómodo, pero siempre será mejor que el equipo pase a un modo de ahorro a que esté activo indefinidamente sin ser utilizado.

Al final de su jornada, le aconsejamos que apague el equipo o, si lo prefiere, lo hiberne.

A continuación publicamos las guías de configuración para los distintos sistemas operativos.

Recuerde que debe ser 'Administrador' o 'usuario avanzado' del equipo para poder configurarlo.

Guías de configuración de ahorro de energía

¿Cómo configuro mi equipo para poder encenderlo desde la Intranet?

Aquí tiene las guías de configuración para los distintos sistemas operativos. Usted debe ser administrador o usuario avanzado del equipo para poder configurarlo.

¿Cómo enciendo mi equipo desde la red?

Encendido Remoto

El ASIC ha creado un servicio para encender los equipos a través de la Intranet, en concreto, el usuario puede encender remotamente sólo los ordenadores en el que está definido como usuario habitual en nuestro inventario de equipos.

El servicio se encuentra en el apartado Herramientas-> Utilidades-> Encendido de Ordenadores a través de la Red de los menús de la Intranet.

Encendido Remoto de aulas

Si administras un aula informática y necesitas arrancarla automáticamente a cierta hora, puedes recurrir a herramientas 'Wake On Lan' para arrancar todos los equipos con un script desde un servidor mediante una tarea programada.

Si necesitas ayuda habla con el ASIC.

¿Cómo apago mi equipo desde la red?

Si se ha entrado en una consola o escritorio remoto es posible apagarlo desde ahí.

En Windows, en el menú de inicio del escritorio remoto no aparece directamente la opción apagar equipo, como cuando estamos conectados delante de él. Pero hay una opción “Seguridad de Windows”, en el primer nivel o en el apartado de “configuración”, según el modo de menús configurado.  

Dentro de “Seguridad de Windows” encontrará el botón “Apagar”.

También hay utilidades para apagarlo sin iniciar sesión en una terminal remota. Si está interesado en ellas contacte con el ASIC.

Nadie que no sea administrador de su equipo puede apagarlo desde la red.

¿Y si mi equipo no arranca?

Revise la configuración de su sistema operativo:

En primer lugar, verifique que la configuración de su sistema operativo es correcta. El ASIC proporciona manuales de configuración para las últimas versiones de los sistemas operativos Windows, Mac y Linux.


Revise la configuración de la BIOS:

En segundo lugar, revise la configuración de la BIOS de su equipo. Si la BIOS de su equipo tiene desactivados los parámetros de "Wake On Lan" o "Wake On PCI" es probable que su equipo no arranque.

Para revisar la configuración de la BIOS, deberá apagar el ordenador completamente (no sirven las opciones de suspender o hibernar el equipo) y entonces, volver a encenderlo para entrar en la BIOS durante los primeros instantes de encendido del ordenador. Para ello, deberá pulsar rápidamente alguna de las siguientes teclas, dependiendo del fabricante de su equipo: tecla suprimir o Supr, tecla ESC, teclas de función F1,  F2, F10 o F12. Puede pulsarlas todas rápidamente o incluso simultáneamente.

Al entrar en la BIOS, tenga en cuenta que los parámetros que necesita cambiar suelen estar en la opción "Power Management" (Administración de Energía) o "Advanced Setup" (Opciones Avanzadas).

Tenga mucho cuidado al cambiar parámetros de la BIOS de su equipo. Podría no arrancar.

El parámetro que es necesario configurar, puede denominarse WOL, "Wake on Lan", "Wake on PCI/PCI-E" o "PME Event Wake UP" (también puede tener algún otro nombre parecido). Deberá dejar el parámetro como "activo", "activado", "habilitado" o "enabled". Recuerde guardar la nueva configuración antes de abandonar la BIOS.


Pruebe el encendido remoto desde la Intranet:

Tras revisar la configuración del sistema operativo y de la BIOS, puede usted probar si el equipo arranca correctamente usando la herramienta de "Encendido de Ordenadores a través de la Red" de la Intranet.

Le sugerimos que pruebe el arranque de su equipo desde la Intranet, mientras está en su despacho, para depurar posibles causas de fallo antes de usar esta herramienta regularmente desde casa.

La herramienta le permite seleccionar el equipo que quiere encender, aunque también es posible indicar que lo vuelva a intentar pasados unos minutos (indicando cuántos minutos desea esperar antes de reintentarlo). Por ejemplo, si usted pulsa el botón de Encender, pero antes, indica que se debe reintentar encender el equipo en 3 minutos, puede usted apagarlo y esperar a ver si posteriormente se enciende pasados esos 3 minutos.

Si su equipo arranca correctamente durante las pruebas, pero no arranca cuando intenta encenderlo tras varias horas de apagado, por favor, comuníquelo al ASIC mediante Gregal (http://gregal.upv.es).


Actualización del controlador de la tarjeta de red:

En caso de que su equipo siga sin arrancar usando la herramienta de encendido remoto de la Intranet, le recomendamos que actualice el controlador (driver) de su tarjeta de red al último disponible para su sistema operativo.

Si su equipo arrancaba correctamente hasta ayer con la herramienta de encendido remoto de la Intranet, le recomendamos probar que la configuración de la BIOS y del sistema operativo sigue siendo correcta y que, a continuación, sustituya el controlador o driver de su tarjeta de red por uno más antiguo, anterior al que esta instalado en estos momentos en su equipo, por si una actualización automática del mismo ha sido el origen del problema.

En sistemas operativos Windows, desde el Administrador de Dispositivos, usando el menú contextual  con el botón derecho del ratón y abriendo las propiedades del dispositivo, puede abrir la configuracion de la tarjeta de red y puede reinstalar el driver o sustituirlo por otro desde la pestaña "Controlador".

También puede habilitar el Wake On Lan desde la pestaña de "Administración de Energía" y comprobar que la propiedad "Magic Packet" está "habilitada" en la Pestaña de "Opciones Avanzadas".


Equipos antiguos:

En el caso de equipos antiguos, podemos también encontrarnos con que no haya soporte para encender el equipo mediante Wake On Lan.


Otras causas de que su equipo no arranque correctamente:

También podría dejar de funcionar el encendido remoto si su despacho se ha quedado sin corriente eléctrica (corte de luz imprevisto o revisión de mantenimiento en el edificio programada por ELECNOR e Infraestructuras).

También podría dejar de funcionar el Wake On Lan si se apagó el equipo la última vez desde el botón de encendido (manteniéndolo pulsado durante varios segundos) o si se desconectó el cable de alimentación del equipo. En este caso, necesitará encenderlo una primera vez de modo manual, funcionando el equipo con normalidad a partir de ese momento. Puede solicitar ayuda a algún compañero que esté presente en las instalaciones de la UPV para que encienda el equipo.

Otra posible causa de que su equipo no arranque es que se haya producido un fallo puntual en la red  y su equipo no esté recibiendo la orden de encenderse o, simplemente, no haya conectividad en la red y no pueda usted conectarse a él hasta que la conectividad se restablezca.

Si su equipo está totalmente apagado porque se ha ido la luz en su edificio, sepa que algunos equipos se pueden configurar para que arranquen automáticamente después de que se reestablezca la corriente. Esto hay que configurarlo en la BIOS o Setup del equipo, accediendo a este menú. Si usted configura esta opción, por favor, configure una suspensión o hibernado automático para que no se quede encendido las 24 horas.


Fallos de la aplicación de Intranet:

Aunque sucede en contadas ocasiones, puede suceder que se produzca un fallo en la aplicación de encendido remoto de la Intranet y por eso usted no pueda encender su equipo correctamente.

En caso de que haya probado todo lo anterior y no pueda encender el equipo, abra un gregal (http://gregal.upv.es) para que busquemos el origen del problema.

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